Si eres de las personas que mira el celular a cada rato para ver si te han enviado o han leído tus mensajes y si observas la última hora en la que tu pareja estaba conectada: te informo que tienes los síntomas de un adicto a WhatsApp, o por lo menos que usas la aplicación de forma un poco obsesiva.
Las personas que padecen de estos síntomas por lo general la pasan mal y adicionalmente, su entorno social también se ve afectado, debido a que tienen discusiones de pareja o con sus amigos por no responder los mensajes cuando ya se ha fijado la hora y el doble “check” que confirma su recepción.
Un típico ejemplo de algunas discusiones que se pueden presentar, es un lunes, 02.30h de la mañana. Apenas quedan seis horas para ir a trabajar; suena el celular, han llegado varios mensajes de WhatsApp. “¿Qué tal?” “¿Qué haces?” “¿Por qué no me contestas?” “¿Estás enfadado conmigo?” Y lo peor de todo no es que te hayan despertado; de verdad van a creer que “estás enfadado”. Sin darte cuenta te has buscado un problema mientras dormías.
WhatsApp es una aplicación que puede generar adicción, yo creo que se convierte en una adicción cuando recibes un mensaje y eso pasa a ser la prioridad número uno, el resto de tus actividades pasan a un segundo plano. Esto puede tener consecuencias en tu trabajo, en tus relaciones de pareja y en otras facetas de tu vida.
Un uso excesivo de WhatsApp puede ser hasta peligroso; cuando vas por la calle observas mucha gente que mientras camina o conduce va haciendo uso de la aplicación, lo cual puede causar un accidente fatal.
Estos pueden ser algunos síntomas que indican que eres un adicto a WhatsApp, o por lo menos que haces un uso demasiado obsesivo de la aplicación:
- Estás pendiente todo el tiempo de recibir nuevos mensajes.
- Miras de forma obsesiva el ‘doble check’ para ver si los mensajes enviados se han leído.
- Revisas las horas de conexión de tus contactos.
- Revisas las actualizaciones de tus contactos.
- Padeces el síndrome de las ‘vibraciones fantasma’.
La obsesión por recibir mensajes en WhatsApp puede hacer que sientas vibraciones de tu celular que no existen. Estas ‘vibraciones fantasma’ vienen acompañadas de mucho estrés, que es más intenso cuantas más veces mires el celular para ver si te ha llegado algún nuevo mensaje.
Esperemos que esta adicción no se convierta en una enfermedad, ya que conseguir que apaguemos el celular es una misión casi imposible. La mitad de la población tiene adicción al celular y este se ha convertido en una herramienta casi imprescindible para comunicarse.
Comparto algunos tips para configurar tu WhatsApp y evitar problemas:
1) Oculta la hora de tus mensajes de WhatsApp. Así nadie sabrá a qué hora los has enviado.
2) Bloquea o elimina a las personas que no te aporten nada y que te escriben sin parar.
3) Abandona los grupos de WhatsApp que ya no te interesen. De lo contrario sólo conseguirás que te molesten con mensajes innecesarios.
4) Si es necesario, borra el historial de conversaciones de WhatsApp.
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